Navegar es algo más que un pasatiempo. Es un amor que sirve de vínculo entre usted y la extensión del océano, junto con la libertad de los mares abiertos. Sin embargo, sigue siendo importante mantener la embarcación en buen estado, sobre todo en lo que se refiere a la jarcia firme, para garantizar que todos sus viajes sean tanto agradables como seguros.
Todo navegante debe saber cuándo cambiar su jarcia. Por ello, esta guía ofrece una perspectiva completa de esta parte indispensable del mantenimiento de un velero, que garantiza que su navegación sea siempre emocionante y segura.
Inspecciones Regulares:
Las inspecciones periódicas de la jarcia firme son el primer paso que hay que dar. Es importante hacer una revisión a fondo antes y después de cada temporada de navegación, sobre todo después de fuertes temporales, porque el desgaste puede no ser visible a primera vista.
La edad es importante:
En general, la jarcia firme debe sustituirse cada 10-15 años. La edad puede variar en función del tipo de material de la jarcia, la frecuencia de uso del velero y las condiciones de navegación. Si su jarcia se acerca a esta edad, es hora de plantearse una actualización.
Desgaste y deterioro visibles:
Compruebe si hay signos de corrosión, filamentos rotos en los aparejos de alambre o grietas en los de varilla. Los aparejos pueden perder su integridad si sufren algún tipo de daño o incluso si se desgastan.
Tras un incidente importante:
Si su velero ha quedado varado o ha sufrido una colisión o una fuerte tormenta, es aconsejable inspeccionar a fondo la jarcia firme y posiblemente sustituirla, ya que, aunque no se aprecien daños de inmediato, es muy probable que haya quedado dañada internamente.
Poner al día su jarcia firme no es simplemente una cuestión de mantenimiento de su velero. También se trata de asegurarse de que cumple con los requisitos de su seguro de velero. Para seguir teniendo cobertura, la mayoría de las aseguradoras exigen que el mantenimiento del velero sea de alta calidad.
Prestar especial atención a los detalles y realizar un mantenimiento proactivo de su yate implica inspecciones periódicas, así como actualizaciones de piezas críticas como la jarcia firme. Yachtsman conoce la importancia de salvaguardar su inversión y las personas con las que navega.